Federico Chiesa está de regreso. Tras una larga travesía marcada por lesiones y altibajos físicos, el extremo italiano ha recuperado la chispa, la velocidad y la confianza que lo convirtieron en una de las grandes promesas del fútbol europeo. Su rendimiento en el arranque de la temporada ha sido determinante para que la Juventus recupere competitividad ofensiva, aportando desequilibrio por banda y un instinto goleador que parecía adormecido. Los aficionados, que no han dejado de apoyarlo en los momentos difíciles, ya lucen con orgullo la camiseta barata juventus, convencidos de que Chiesa vuelve a ser la estrella que necesitan.
El cambio más evidente ha sido en su explosividad. Chiesa ha recuperado su zancada característica y su agresividad en el uno contra uno, algo que lo hace casi imparable cuando encara a campo abierto. Max Allegri ha sabido aprovechar su versatilidad, ubicándolo tanto como extremo por izquierda como segunda punta, liberándolo de tareas defensivas para que pueda centrarse en hacer daño con sus cualidades ofensivas.
Además de sus goles y asistencias, destaca su actitud. Chiesa no solo corre, también contagia. Es el primero en presionar, en levantar al público con una carrera, en exigir al rival con cada balón dividido. Esa energía ha revitalizado a una Juventus que necesitaba volver a contar con una figura desequilibrante en los últimos metros.
Sus estadísticas reflejan su impacto. En los primeros partidos de la campaña ha participado directamente en varios goles, con remates certeros y pases decisivos. Más allá de los números, es su presencia lo que marca la diferencia. Cuando Chiesa está en forma, la Juventus juega a otra velocidad.
El extremo italiano también ha sido clave en los partidos grandes. Ante rivales como Inter o Napoli, ha mostrado carácter y liderazgo, buscando siempre el balón en los momentos de máxima presión. Esta nueva versión más madura de Chiesa lo coloca como uno de los extremos más completos del campeonato.
En un contexto donde los extremos puros escasean, su regreso al máximo nivel es una excelente noticia para la Juventus y también para la selección italiana. Si mantiene este ritmo, será sin duda uno de los nombres a seguir en la Serie A y en los próximos torneos internacionales.
Mientras tanto, los hinchas de la Juve disfrutan del espectáculo, sabiendo que tienen en sus filas a un futbolista capaz de cambiar partidos. Y lo hacen vistiendo sus mi camiseta réplica de fútbol, con el número 7 en la espalda, símbolo de una esperanza renovada y del renacer de una estrella.